martes, 6 de enero de 2015

Ascensión a Las Empanadas

Subida a Las Empanadas


Datos de la ruta

Punto de partida: Cortijos del Nacimiento
Longitud: 13km
Altitud mínima: 1170m
Altitud máxima: 2106m
Desnivel acumulado: 1230m
Dificultad: media-alta en condiciones normales y muy alta en esta jornada (terreno peligroso y condiciones climatológicas adversas).

Imagen satelital (arriba) e imagen en 3D (abajo) con la ruta llevada a cabo. Mapa elaborado a partir de los datos proporcionados por reloj Polar RC3 GPS. Track disponible.

Perfil altitudinal de la ruta. Datos proporcionados por reloj Polar RC3 GPS.


Descripción de la ruta

Buenas, compañer@s de montaña, es un placer presentaros la primera ruta oficial del club por nuestra maravillosa sierra, la cual llevamos a cabo el pasado día 28 de diciembre. En esta ocasión, y como no podía ser menos, nos dispusimos a coronar uno de los colosos de este sistema montañoso; el pico Empanadas, con 2106 metros sobre el nivel del mar. Como ya comentamos, este pico es compartido con el vecino Parque Natural de la Sierra de Cazorla, Segura y Las Villas. Sin embargo, su singularidad y majestuosidad solo pueden ser apreciadas desde la vertiente del Parque Natural de la Sierra de Castril, ya que son su carácter agreste y montañoso los que lo dotan de una identidad única. Así pues, nuestros pasos comenzaron sobre las 9:30 de la mañana, momento en el cual el grupo formado por Rubén, Paquito, Paqui, Rafa y Pili iniciaba la caminata desde los Cortijos del Nacimiento, discurriendo algunos metros por el sendero común del Nacimiento del Río Castril, y desviándonos hacia la Veleta a altura del puente. A partir de aquí, el desnivel acumulado y el carácter técnico del terreno, debido tanto a la litología como a la meteorología, verdadera protagonista de la jornada, añadirían un puntito extra de dureza a una ruta que ya de por si es catalogada con un nivel de dificultad alto para cualquier senderista medio. Sin embargo, y a pesar de las "adversidades", nuestro trekking fue de lo más ameno y gratificante, disfrutando de las maravillas naturales de nuestra sierra, entre las que destacan el increíble Collado de las Margaritas o el espectacular Barranco de Túnez, además de una variada y rica flora, afectada irremediablemente, y como ocurre en otras partes de nuestra región, por destructivas plagas de procesionaria, una fauna no deseada que se obceca en restar calidad ambiental y paisajística a esta joya natural. Sin embargo, no toda la fauna es destructiva, y también pudimos avistar un maravilloso ejemplar de cabra montés, así como alguna que otra ave que desafiaba a las inclemencias del tiempo, y es que la densa niebla, el frío, el hielo y la nieve no fueron unos fieles aliados en aquel día. Pocas vistas pudimos contemplar, tanto en el recorrido como en la cima, y es que los -2ºC en la cima, sumados a las intensas rachas de viento (en torno a 50-60km/h), arrojaban una escalofriante sensación térmica de -20ºC. Así, como es lógico, y por desgracia, no tuvimos tiempo de tomar la pertinente foto de grupo en la cima, y solamente Rafa se atrevió a despojarse de sus guantes para inmortalizar su momento en lo más alto. Y sin prácticamente tiempo para asimilarlo, deshicimos nuestros pasos con la prudencia y seguridad que requerían las condiciones, y aunque nuestra idea inicial era descender por el Maestrillo, la densa niebla y el riesgo de desorientación nos hicieron abortar los planes y volver por el mismo camino que seguimos en el ascenso. Algún que otro pequeño resbalón sin mayores consecuencias y regreso al punto de partida cuando el reloj marcaba casi las 16h. Total, un magnífico y comprometido día de montaña en buena compañía, siendo testigos directos de como una montaña media se puede convertir en mucho más que eso. Sin embargo, buen equipo, conocimiento de la zona y respeto a la montaña son suficientes para convertir las dificultades en disfrute montañero. Sin más, nos despedimos de vosotros.

Hasta la próxima...


Aproximándonos a la Veleta.

 
Primeros metros con gran desnivel.


Esta zona de la Veleta presentaba unos desniveles importantes. 


Primer sector superado.

 
El grupo posando con el impresionante Collado de las Margaritas al fondo.

 
Últimos minutos sin niebla con este bonito pináculo de testigo.

 
Seguimos para arriba.

 
Ganando altitud y el frío que hacía acto de presencia.


Rafa en uno de los descansos.

 
Paqui y Pili en una de las zonas complicadas de la ruta. Nieve, hielo y un gran desnivel dificultaban el paso.

 
A partir de aquí la visibilidad sería casi nula.

 
Mucho frío. Así estaba el pelo de Paqui.

 
Muchísimo viento en los metros próximos a la cima.

 
Por fin aparecía el ansiado vértice geodésico que nos marcaba nuestro objetivo.

 
Y este era el aspecto en la cima. Escasos segundos permanecimos en ella...

 
Rafa posando junto al congelado vértice geodésico.

 
Imagen que resume la climatología de la jornada.